NUEVA YORK (AP) — Un jurado de 12 personas y seis suplentes se completó el viernes para el juicio a Donald Trump por pagos destinados a encubrir información, lo que acerca al primer proceso penal contra un expresidente de Estados Unidos a sus declaraciones iniciales.
Los abogados pasaron días interrogando a decenas de neoyorquinos para elegir el panel, que ha prometido dejar de lado sus puntos de vista personales y juzgar imparcialmente si el presunto candidato presidencial republicano es culpable o no. El jurado incluye un profesional de ventas, un ingeniero de software, un profesor de inglés y varios abogados.
El juicio mantendrá a Trump en un tribunal de Manhattan durante semanas, lo que lo obligará a hacer malabarismos con su doble papel como acusado penal y candidato político en el contexto de su reñida contienda contra el presidente Joe Biden. El proceso incluirá testimonios lascivos y poco halagadores que su oponente sin duda aprovechará para tratar de presentarlo como no apto para regresar a la Casa Blanca.
El caso presentado por el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, acusa a Trump de falsificar registros comerciales para suprimir relaos sobre su vida sexual que surgieron en los últimos días de las elecciones de 2016.
Se centra en un pago de 130.000 dólares que el abogado y asesor personal de Trump, Michael Cohen, hizo poco antes de las elecciones de 2016 a la actriz porno Stormy Daniels para evitar que sus afirmaciones de un encuentro sexual con Trump se hicieran públicas en los últimos días de la contienda.
Los fiscales afirman que Trump ocultó la verdadera naturaleza de los pagos en los registros internos cuando su empresa reembolsó a Cohen, quien se declaró culpable de cargos federales en 2018 y se espera que sea un testigo crucial para la fiscalía.
El expresidente ha negado haber tenido un encuentro sexual con Daniels y sus abogados argumentan que los pagos a Cohen fueron gastos legales legítimos.
Trump, que enfrenta 34 cargos por delitos graves de falsificación de registros comerciales, ha negado haber cometido delito alguno. Podría recibir hasta cuatro años de prisión si es declarado culpable, aunque no está claro si el juez optará por ponerlo tras las rejas. Es casi seguro que Trump apele cualquier fallo condenatorio.
El caso por pagos para encubrir información se encuentra entre los cuatro procesos penales que involucran a Trump cuando busca recuperar la Casa Blanca, pero es posible que sea el único caso que llegue a juicio antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
Apelaciones y otras disputas legales han retrasado los casos en que se acusa a Trump de conspirar para anular los resultados de las elecciones de 2020 y de acaparar ilegalmente documentos clasificados.