Santo Domingo.– El empresario turístico Frank Rainieri, fundador del Grupo Puntacana, afirmó este martes que la migración haitiana debe ser abordada como un tema nacional que afecta a todos los sectores, no solo a la construcción o el agro, e hizo un llamado a reconocer la dependencia del país hacia esa mano de obra, a fin de trazar una solución ordenada, gradual y realista.
“El problema de nuestro vecino no es el problema de uno, es un problema del país. Y a todos nos afecta. No importa en qué grupo político tú estés o en qué sector de la vida nacional”, expresó durante el almuerzo “Plan Meta 2036”, organizado por la Cámara Americana de Comercio (Amchamdr), en presencia del ministro de la Presidencia, José Ignacio Paliza, y el director del Consejo Nacional de Competitividad, Peter Prazmowski.
Rainieri destacó que incluso sectores que critican públicamente la migración haitiana cuentan con empleados de esa nacionalidad en sus casas y negocios. “Ya mucho del servicio en las casas de familia, de los mismos que critican, es haitiano. Y el motoconcho… ya yo no sé qué porciento, pero tú te das cuenta cuando te paras al lado de un estacionamiento de motoconchos que ya hay un porciento importante que son haitianos”, señaló.
Para el empresario, no basta con rechazar la presencia de haitianos en el país. A su juicio, es imprescindible diseñar un plan de transición, que permita sustituir esa fuerza laboral de manera progresiva por tecnología o empleo local, sin provocar disrupciones que afecten a la población.
“Yo sí creo que deben racionalizarse. Y por eso creo que debe hacerse un plan, un plan que vaya poco a poco sustituyendo esa mano de obra a base de tecnología”, propuso. Y advirtió: “Si no se corta el arroz y se pone la libra de arroz a 100 pesos, esos mismos que hoy están atacando son los que van a atacar al Gobierno… porque está caro el arroz”.
Finalmente, Rainieri valoró positivamente el reciente encuentro de los expresidentes dominicanos Leonel Fernández, Hipólito Mejía, Danilo Medina y Luis Abinader, a quienes llamó a poner sus capacidades al servicio de una solución nacional.
“Lo bueno es que se reunieron los cuatro expresidentes, y yo espero, y le pido a Dios y a ellos, que nos escuchen, que por favor traten de aportar buenas ideas para poder organizar este tema migratorio que tenemos aquí como un problema nacional”, concluyó.